Mis experiencias con el Hospital de Cirugía Especial de Nueva York

Fue una experiencia enriquecedora en esta institución de renombre, alto rendimiento y alta calidad, donde me especialicé en artroplastia, cirugía de pie y tobillo, y reconstrucción de extremidades. Con más de 30 quirófanos abiertos diariamente y más de 160 cirujanos, la gran cantidad de opciones era abrumadora.

 

Me impresionaron especialmente los días en que dos quirófanos funcionaban simultáneamente, la notable eficiencia de los grandes equipos de médicos residentes, auxiliares médicos y enfermeras quirúrgicas, la disponibilidad y el uso de todos los implantes y sistemas robóticos imaginables y, por supuesto, la palpable pasión de todos por la ortopedia.

 

Además de mi tiempo en quirófano y en consultas externas, también tuve el placer de participar en numerosos eventos de formación continua, incluyendo conferencias médicas, sesiones semanales de simulación y el curso HSS sobre cirugía de rodilla y cadera. Estos eventos propiciaron estimulantes debates sobre la alineación y el posicionamiento de prótesis, tecnologías robóticas (y no robóticas), técnicas de revisión y los aspectos económicos y comerciales de la ortopedia.

Regreso a los Países Bajos

Fue un gran placer vivir en esta fantástica y vibrante ciudad, explorar Manhattan y recibir a mis amigos y familiares. Ahora es momento de regresar a los Países Bajos y a mi trabajo, ¡enriquecido con nuevas experiencias!